En Tecnologie FRB siempre nos hemos dedicado a la Investigación y Desarrollo de productos y soluciones de alto contenido innovador. En los mecanizados de rectificado fuimos los primeros en introducir, en 1985, el sistema de arrastre frontal, incluso con ejes templados. Este nuevo sistema de mecanizado ha logrado cada vez más aprobación en el transcurso de los años llegando hoy en día a garantizar un óptimo resultado.
Las operaciones de rectificado generalmente son necesarias para obtener, con cualquier pieza, precisiones y grados de rugosidad superficiales sumamente cuidados.
Entre las aplicaciones más comunes que ligan el arrastrador al rectificado proponemos para el sector de la automoción todos los ejes del cambio y de distribución, así como ejes para motores eléctricos, bombas, reductores, piñones, o sea todo lo que se caracteriza por dos centros. La introducción del sistema de arrastre frontal ha eliminado, en algunos casos, el uso del perno excéntrico y, por consiguiente, del operador, permitiendo, pues, una completa automatización del mecanizado.
Otra ventaja, respecto a sistemas de aprehensión con husillo o pinza sobre diámetro, es poder mecanizar también el diámetro mismo evitando tener que volver a aprehender la pieza, permitiendo, pues, mecanizarla en una única solución obteniendo una óptima ventaja en cuanto a precisión en el menor tiempo posible. Asimismo, gracias al uso de un contrapunto giratorio, respecto a un mecanizado con brocas fijas normales, es posible alcanzar velocidades de la pieza superiores a 1000 rpm, para poder aprovechar plenamente los parámetros de corte de las amoladoras de última generación.
Otra ventaja, respecto a sistemas de aprehensión con husillo o pinza sobre diámetro, es poder mecanizar también el diámetro mismo evitando tener que volver a aprehender la pieza, permitiendo, pues, mecanizarla en una única solución obteniendo una óptima ventaja en cuanto a precisión en el menor tiempo posible. Asimismo, gracias al uso de un contrapunto giratorio, respecto a un mecanizado con brocas fijas normales, es posible alcanzar velocidades de la pieza superiores a 1000 rpm, para poder aprovechar plenamente los parámetros de corte de las amoladoras de última generación.